Sin duda los dildos de cristal son el no va más del buen gusto. De todos los materiales que tenemos para elegir, el cristal es el que más ventajas ofrece.
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Qué son los dildos de cristal
Los dildos de cristal son el compañero de juegos perfecto tanto para la vagina como para el ano, de hecho, no sólo existen dildos simples, los tenemos también con vibración, ¡yupi!
Si se cuidan bien, los dildos de cristal duran toda la vida, y son mucho más sencillos de conservar que el resto.
Características y ventajas
Los dildos de cristal son muy resistentes.
Es de suponer que no vamos a andar a golpes con él, y menos siendo tan elegantes como son, pero claro está, si lo golpeamos fuertemente sobre una superficie muy dura lo estropearemos, pero pasa así con todos. Si nos resbala mientras lo lavamos y nos cae, no problem, no le pasará nada. Si tenéis cualquier accidente de este tipo, mejor mirad bien que no se haya dañado el dildo, ya que una muesca o grieta nos puede lastimar pero insisto, no suele pasar, son prácticamente irrompibles.
Son facilísimos de limpiar y mantener.
Tan sencillo como lavar con jabón y agua. Es más, se pueden meter en el lavavajillas. No hacen falta cuidados especiales ni mantenimiento específico, pero si se quiere se pueden limpiar también con los limpiadores de juguetes. Al no ser poroso, en el cristal no se alojan bacterias y se mantiene limpio y desinfectado mucho más tiempo. Si tienen vibración, acordaos de quitar las partes electrónicas antes de lavarlos.
Por supuesto son completamente sumergibles, juega con ellos en la bañera, la ducha, la piscina, el mar…
Es seguro para la salud, son completamente hipoalergénicos.
Perfectos para todo tipo de personas. Si tienes dudas al elegir un juguete por miedo a que te pueda dar alergia, ¡estos son tus dildos!
100% reciclables, o sea, súper ecológicos.
Que no se diga que no respetamos el medio ambiente.
No necesitan mucho lubricante.
Los dildos de cristal apenas necesitan lubricación, el cristal es un material que se desliza muy bien con poquísima humedad y sin fricciones, es terso y suave y no irrita la piel en ningún caso. Si lo vais a introducir en el ano, sí conviene que lo lubriquéis, pero necesita menos cantidad que otros dildos o plugs. Esto es a gusto de cada uno, y si lo pasáis mejor lubricándolos, lo mejor es que lo podéis hacer con cualquier tipo de lubricante. Al contrario que sucede con otros juguetes, el cristal soporta cualquier componente que lleven los lubricantes, por lo que podéis usar el que os apetezca.
Ofrecen nuevas sensaciones.
Parecido a lo que sucede con los dildos de metal, los de cristal también nos ofrecen nuevas sensaciones con cambios de temperatura. Si nos apetece calentito, lo sumergimos en agua caliente un rato o meter en el micro unos segundos y podemos notar como se va enfriando dentro poco a poco. Si nos apetece fresco, lo dejamos unos minutos en el congelador o frigorífico. Así de cómodo y placentero.
Pesan un poco más que otros dildos.
Esto es una ventaja, Lovers, porque gracias a eso aporta una sensación muy agradable de peso en nuestro cuerpo, y su firmeza y rigidez nos permiten alcanzar más cómodamente y de manera más precisa nuestro punto ‘G’ o el punto ‘P’ y ‘R’ en los chicos. Pero como mencioné antes, todo depende del gusto de cada uno, hay quien los prefiere más blanditos.
¡Son muy artísticos y bonitos!
Y por último lo que salta a la vista, ¡son pequeñas obras de arte! Al ser de cristal soplado, tienen unas formas y colores que, por lo menos a mí, me parecen súper bonitos. Y dependiendo de cómo les de la luz, crean unos reflejos muy lindos.
Espero que os gusten a vosotros también, mis queridos Lovers.
¡Mucho más aquí!